Un herido y ensangrentado Seiya Tsutsumi (9-0-2, 7 KOs) anotó cuatro derribos en su camino hacia una decisión unánime en 10 asaltos en el evento co-principal de la contienda por el campeonato indiscutible del peso supergallo entre Naoya Inoue y Marlon Tapales en Tokio, Japón.
Tsutsumi peleó la mayor parte del combate con un grave corte en el ojo izquierdo en una contienda fluida contra Kazuki Anaguchi (6-0, 2KOs).
Los boxeadores tenían estilos opuestos. Anaguchi comenzó el combate plantando cara a Tsutsumi, que se adentraba con frecuencia en el cuadrilátero, lo que le permitía contrarrestarlo con golpes rectos de izquierda. En el segundo asalto, Tsutsumi intentó la misma táctica, lo que permitió a Anaguchi repetir un éxito similar, con un uppercut destacado que hizo retroceder la cabeza de Tsutsumi en el ecuador del asalto.
Tsutsumi sufrió un corte por encima del ojo izquierdo en los primeros instantes del tercero, mientras intercambiaban golpes en el centro del cuadrilátero. Tsutsumi pecó de saltar a la acción y Anaguchi utilizó la agresividad de Tsutsumi en su contra.
Parecía que el cuarto iba a ser una repetición del asalto anterior hasta los últimos rescoldos de la sesión. Tsutsumi aterrizó con un gancho de izquierda cortante y siguió con una combinación de tres puñetazos para enviar a Anaguchi a la lona. Anaguchi volvió a ponerse en pie, pero se tambaleaba.
Se encontraron cara a cara e intercambiaron golpes en el interior. Tsutsumi sacó lo mejor de él, con un doble uppercut de izquierda que detuvo a Anaguchi en seco. El propio Anaguchi encontró un hueco al final del asalto para asestar un izquierdazo, al que siguió una combinación de cuatro golpes que devolvió a Tsutsumi a su esquina.
Anaguchi volvió a boxear a distancia tras un quinto asalto áspero y preparado, utilizando su jab para mantener a raya a Tsutsumi, al que siguió con varias manos izquierdas, que dañaron el ojo ya cortado de Tsutsumi.
Tsustumi logró un fuerte derribo en el séptimo asalto, cortesía de una mano derecha, mientras las defensas de Anaguchi quedaban al descubierto. Tsutsumi empujó la acción mientras Anaguchi volvía a ponerse en pie, pero Anaguchi estaba cada vez más cansado con cada golpe, aunque terminó el asalto encontrando la distancia para contrarrestar a Tsutsumi.
En el octavo, Anaguchi boxeó a un ritmo más cómodo y fue capaz de mantener a Tsutsumi a la distancia durante la mayor parte del asalto. En el noveno, Tsutsumi anotó un tercer derribo con otra mano derecha mientras Amaguchi descuidaba la colocación de sus manos a la defensiva antes de que la acción volviera a calentarse, peleando cuerpo a cuerpo mientras intercambiaban golpes al cuerpo y uppercuts.
Tsutsumi anotó el cuarto y último derribo en el 10º, cuando Anaguchi parecía dispuesto a terminar un asalto fuerte y mantener a distancia a un Tsutsumi ensangrentado. Sin embargo, el cansancio hizo mella en una parte y Tsutsumi fue capaz de asestar una combinación de cuatro golpes sin respuesta que envió a Amaguchi a la lona por cuarta vez a falta de sólo 10 segundos para el final del asalto.
Andy Hiaroka (22-0, 17 KOs) rompió una racha de 377 días de inactividad al derrotar en el quinto asalto a Sebastián Díaz Maldonado (18-6-1, 13 KOs) en el peso welter. Hiaroka derribó a Maldonado con un golpe de derecha en los primeros 90 segundos de la primera sesión.
Maldonado luchó por encontrar una forma de ser efectivo para contrarrestar la desventaja de alcance y altura durante toda la contienda; sin embargo, en el tercer asalto, fue capaz de aterrizar combinaciones de ganchos de puño cuando pudo empujar a Hiaroka hacia las cuerdas.
Al comienzo del quinto de los ocho asaltos programados, Maldonado recibió un golpe bajo de Hiaroka y tuvo tiempo para recuperarse. Maldonado reanudó rápidamente la acción y finalmente se vio superado por Hiaroka, que volvió a presionar a Maldonado contra las cuerdas. Hiaroka lanzó varios ganchos rápidos y rectos a pesar de que Maldonado bloqueó y rechazó los golpes. El árbitro John Hachisuka detuvo prematuramente el combate tras 1:52 del quinto.
Yoshiki Takei (7-0, 7KOs) mantuvo su imbatibilidad como profesional y su racha de nocauts con un nocaut en el segundo asalto sobre Mario Díaz Maldonado (21-6, 9KOs). Takei asestó un golpe al hígado de su oponente mexicano.
