El peso semipesado letón Ricards Bolotniks (19-6-1) voló a Londres el mes pasado para enfrentarse a Craig Richards (17-3-1). El combate estaba previsto en la cartelera de Dillian Whyte contra Jermaine Franklin por cortesía de Matchroom Boxing y Eddie Hearn.
Lo que siguió fue, peculiar, por decir poco. Cuando comenzaron las festividades de la semana de la pelea, Craig Richards no aparecía por ninguna parte. Primero en el entrenamiento abierto, luego en la rueda de prensa y también en el pesaje. Al final, el combate no se celebró.
"Las excusas cambiaban cada día. Primero fue que estaba en tráfico, luego que estaba enfermo. Sabía que algo iba mal, no soy estúpido", dijo Ricards Bolotniks.
"Tuve que hacer un control de peso el miércoles. Ahí empezaron las historias. Obviamente, los dos tenemos que comprobar que no estamos por encima del peso, y hacer las cosas muy justas, como en cualquier combate de clasificación. De todos modos, le pregunté dónde estaba. Al parecer se pesó esa mañana. Mi equipo y yo nos fuimos, me pesé para el control de peso y nos fuimos a comer. No iba a esperarle todo el día.
"Así que estoy decidiendo darle al tipo el beneficio de la duda con todas estas historias de tráfico. Como hago con todos mis combates, compruebo sus redes sociales y demás para hacerme una idea de su aspecto en la semana del combate. Pero no había rastro de Craig Richards por ninguna parte, es obvio que no estaba atrapado en el tráfico. Todo lo que dijo el tipo de Matchroom fue una contradicción".
Ricards Bolotniks continuó con su versión de los hechos el jueves y el viernes de esa semana de pelea.
"¿Adivinen qué? Ni siquiera se molestó en presentarse a la rueda de prensa. Me tienen ahí sentado delante de los medios de comunicación fingiendo que va a haber una pelea entre Craig (Richards) y yo. A estas alturas, ¡estoy seguro de que no habrá pelea! Vuelvo a preguntarle dónde está. Ahora la historia ha vuelto a cambiar, esta vez me dicen que tiene problemas personales.
"El viernes llega la hora del pesaje y ¡la excusa vuelve a cambiar! ¡Esta vez está enfermo! Primero está atascado en el tráfico, luego tiene problemas personales y la excusa final fue que estaba enfermo. Esto es inaceptable. Creía que los británicos eran famosos por sus modales, pero esto demuestra lo contrario.
"He enviado un mensaje a Craig para ver si podemos solucionar esto, pero ha sido ignorado. No hemos recibido ningún mensaje ni llamada de Matchroom ni de nadie del equipo de Craig Richards. Veo algunos rumores en las redes sociales al respecto, pero no soy una persona de rumores. Sólo necesito que sean sinceros conmigo, ¡de hombre a hombre! Hasta ahora ha sido un comportamiento muy infantil.
"Esto no es una broma, es mi vida, mi carrera. Nos hemos preparado como siempre, como profesionales, mi promotor, LNK Boxing, me ha preparado buenos sparrings, hemos enviado a buenos boxeadores a Riga, les hemos pagado y nos hemos ocupado de ellos, todo a cambio de nada. No nos quedaremos sentados esperando una llamada, llegaré al fondo de este asunto".