Devin Haney, campeón indiscutible de las 135 libras, parece encaminado a subir a las 140 libras para pelear con Regis Prograis, campeón de los superligeros de la WBC, en lo que es una buena pelea. Ambos, a pesar de haber logrado tanto, tendrán algo que demostrar tras sus anteriores peleas. Prograis no dio una buena imagen en lo que se esperaba que fuera una pelea más fácil de lo que fue, contra Danielito Zorrilla, y Haney recibió una controvertida decisión sobre Vasyl Lomachenko en una noche de mayo que la mayoría pensaba que había perdido.
Si lo hace, probablemente habremos visto lo último de él en el peso ligero; antes de pelear con Lomachenko no ocultó sus dificultades para llegar a las 135 libras, y si deja que su cuerpo crezca en otra división de peso será aún más difícil para él volver. También hay muchas otras buenas peleas para él en 140 libras.
Contra Zorrilla, Prograis peleó, y venció, a un oponente torpe que podía golpear. Es difícil dar una buena imagen ante rivales incómodos, y los rivales incómodos que pueden pegar significan que un boxeador no puede arriesgarse demasiado. Es difícil elegir un ganador entre Prograis y Haney; ambos tienen un cierto grado de impulso; Haney es el que está en ascenso, por lo que potencialmente es un favorito por esos motivos, pero también está relativamente poco probado al más alto nivel. Su única victoria allí se produjo contra Lomachenko, a quien muy pocos creían que realmente había vencido. A sus 34 años, como boxeador de más edad, Prograis podría incluso sentir que tiene algo que demostrar.
Una pelea propuesta entre Shakur Stevenson y Frank Martin está en duda, lo que es frustrante. Si no se produce, Martin, de Premier Boxing Champions, tendrá otras opciones al estar con un buen equipo. Stevenson es el mejor boxeador de la división, pero incluso si Martin pierde contra él, Martin también es un boxeador en ascenso: si le da a Stevenson su pelea más dura, cosa que tiene potencial para hacer, se convertiría en un gran nombre.
Aunque Stevenson hubiera sido el favorito, no hay razón para que hubiera ganado tan cómodamente como lo hizo contra, por ejemplo, Oscar Valdez en el 2022. Si Edwin De Los Santos es su oponente en su lugar - cuando eres tan bueno como Stevenson, habrá momentos en que te sientas frustrado por no conseguir los oponentes que esperas, como a menudo se aplicó a Terence Crawford antes de que finalmente peleara con Errol Spence - entonces De Los Santos merece crédito por tomar una pelea que rivales de mayor perfil no han hecho.
También podríamos ver pronto una revancha entre Gervonta "Tank" Davis e Isaac Cruz. La primera pelea, en el 2021, fue buena -Davis se lesionó la mano y por eso impresionó al utilizar sus habilidades boxísticas-, pero los 12 asaltos que compartieron deberían significar que Cruz, que como Davis también ha mejorado, creerá más en sí mismo en la segunda ocasión. Fue injustamente criticado por su actuación contra Giovanni Cabrera, un boxeador torpe y móvil, lo que, dado que Cruz tiene pies lentos, no le ayudó. Davis puede tener pies rápidos cuando los utiliza, pero es un boxeador más estacionario, lo que significa que existe el potencial para que Davis-Cruz II sea explosivo. Cruz siempre aplica un nivel de presión que le convierte en una prueba para cualquiera: es una pelea más dura que la de Ryan Garcia, a quien Davis detuvo en abril.
Lomachenko será uno de los grandes favoritos si acaba peleando contra George Kambosos Jr. En comparación con cuando estaban a punto de pelear por el título indiscutible, parece anticlimático: desde entonces, Kambosos Jr ha sido derrotado dos veces seguidas por Haney y ha recibido una decisión sobre Maxi Hughes que la mayoría no creía merecer. Incluso si, como espero, Lomachenko gana fácilmente, no estoy seguro de dónde deja eso a Lomachenko. Cuando iban a pelear antes de Kambosos Jr tuvo una muy buena noche en cambio contra Teofimo Lopez - a quien nunca he visto lucir tan mal. También tuvo una buena victoria contra Mickey Bey en el 2019, pero no sé si la versión actual de Kambosos Jr vencería a esa versión de Bey, aunque siga siendo duro, fuerte y decidido.
En julio, Andy Cruz hizo su debut profesional cuando superó a Juan Carlos Burgos sobre 10, y no fue una sorpresa que impresionara. Si se le promociona correctamente, lo que puede resultar difícil en el caso de los boxeadores cubanos, tiene un gran futuro, sobre todo porque los aficionados cubanos pelean hoy en día con un estilo más profesional. Espero que progrese rápidamente, incluso me atrevería a decir que ganaría hoy a Kambosos Jr.
