Vergil Ortiz desconfía de las consecuencias de que su pelea con Eimantas Stanionis choque con la de Jaron Ennis vs. Roiman Villa.
En caso de que se produzcan las victorias previstas para Ortiz y "Boots" Ennis, volverán a ser considerados como el futuro de la división del peso welter, de la que se espera que entre en una nueva era tras la pelea entre Terence Crawford y Errol Spence a finales de mes.
Ortiz, de 25 años, pelea contra Stanionis, lituano de 28, en el AT&T Center de San Antonio, en una promoción rival a la que Ennis disputa contra Roiman Villa en Atlantic City, y reconoce el riesgo de que las audiencias de sus combates se reduzcan por ello.
Ortiz y Ennis podrían llegar a tener una rivalidad similar a la de Crawford y Spence, pero Ortiz, que está bajo la dirección de Golden Boy Promotions, dijo: "Es conflictivo. Realmente es conflictivo, especialmente cuando ves boxeadores que también salen de la misma categoría de peso.
"'¿A cuál voy a ver?' No me preocupa necesariamente, porque tengo otra cosa de la que preocuparme esa noche, pero si pudiera opinar, entonces sí, deberíamos haber peleado en noches diferentes".
Preguntado por una posible pelea futura entre él y Ennis, que pelea el sábado en una promoción supervisada por Premier Boxing Champions, Ortiz dijo: "Es una pelea interesante, seguro, y tendremos que esperar y ver para que eso suceda, pero definitivamente es interesante. No le veo pelear mucho, pero no puedo decir nada malo de él, es un buen boxeador".
"No creo que su rival [Roiman Villa] sea fácil en absoluto. Ya vimos lo que hizo con [Rashidi] Ellis [por decisión mayoritaria en enero], que demostró que cualquiera puede ser peligroso en cualquier momento, así que no me gusta dudar de los boxeadores.
"A mí [tampoco] me importa lo que piense la gente sobre quién está por delante y quién no. Soy el mejor peso welter: eso es lo esencial".
