Gennadiy Golovkin invadió Estados Unidos y se convirtió en el rostro de la división del peso medio durante la mayor parte de la última década. Acuñando frases como " estilo mexicano" y " Gran Drama Show", Golovkin fue un boxeador entretenido, que tenía pegadizas frases de una sola línea no muy diferente a un Arnold Schwarzenegger de primera, diciendo "Volveré", y fue una de las últimas estrellas de la era de HBO Boxing antes de dejar el deporte del boxeo para siempre.
Un boxeador que pasó buena parte de los inicios de su carrera en el extranjero, peleando en Alemania, se trasladó a Big Bear Lake, California, y comenzó a entrenar con Abel Sánchez, trayendo consigo su título mundial de peso medio de la WBA. Golovkin debutó en HBO Boxing en julio del 2012 contra Grzegorz Proksa, una pelea que tomó principalmente por la oportunidad de ser visto. Lo que sucedió después fue que HBO Boxing se puso firmemente detrás de Gennadiy Golovkin cuando se convirtió en uno de los atletas destacados de la cadena. Para cuando Golovkin peleó contra Marco Antonio Rubio en el StubHub Center de Carson, California, Golovkin llenó el recinto con 9,323 aficionados que asistieron a ver cómo detenía a Rubio en el segundo asalto.
Daba la sensación de que no sin más había nacido una estrella, sino que había nacido una estrella de la costa oeste.
La pelea de Golovkin contra Willie Monroe Jr. el 16 de mayo del 2015, fue probablemente la montaña cúspide del logro de Golovkin tanto en el ring como en términos de popularidad en el mercado de Los Ángeles, ya que 12,372 llenaron El Forum en Inglewood, California. Al igual que Marvin Hagler, que se convirtió en la quinta franquicia deportiva de Boston, Massachusetts, en su mejor momento, Golovkin se sintió como una entidad deportiva adoptada a la que todo Los Ángeles apoyaba.
En la pelea, Golovkin detuvo en seis asaltos a Willie Monroe Jr, sobrino nieto de Willie " El Gusano" Monroe, que derrotó a Marvin Hagler. Golovkin derribó a Monroe dos veces en el segundo asalto antes de que el combate se detuviera en el sexto.
Golovkin asestó 133 de sus 297 golpes, un rasgo característico de su carrera. A pesar de ser considerado un pegador por su fuerza física, Golovkin era un mecánico y un científico en el cuadrilátero, ya que tampoco fallaba demasiado.
La carrera de Golovkin continuaría su tendencia ascendente, ya que se enfrentaría a David Lemieux en HBO pay-per-view después de esta pelea y luego reclamaría tres de los cuatro principales títulos de peso medio de la era, los títulos de peso medio de la IBF, la WBA y la WBC cuando derrotó a Daniel Jacobs en el 2017. Podría decirse que la carrera de Golovkin se estancó cuando peleó contra Canelo Álvarez a un empate y luego perdió la revancha, ya que aparentemente nunca fue el mismo después de esa pelea tanto dentro como fuera del ring.
Monroe, por su parte, sufriría su segunda derrota como profesional, y lucharía con actividad. La última pelea extremadamente relevante de Monroe Jr fue contra Billy Joe Saunders en el 2017, en la que perdería por decisión unánime. Monroe Jr no ha peleado desde el 2019.
El camino de Golovkin después de Monroe Jr.
Golovkin estaba en un punto de su carrera en el que lucía como el mejor peso medio de su era, y apuntaba a la corona de campeón indiscutible de peso medio del mundo.
Golovkin fue la rara superestrella del boxeo que viajó a dos peleas después de detener a Monroe Jr. peleó contra Kell Brook en el O2 Arena de Londres, Inglaterra. En su siguiente combate, después de detener a Brook, Golovkin derrotaría a Daniel Jacobs en pay-per-view, pero nunca pudo conseguir una pelea con Billy Joe Saunders por el título de peso medio de la WBO para ganarse la etiqueta de indiscutible.
Golovkin se convirtió en el campeón del pueblo, aunque suene a cliché. Golovkin fue acogido por la gente de Los Ángeles, y considerado como uno de los mejores pesos medios de la era moderna, si no el mejor, mientras Golovkin seguía buscando su "gran pelea" con Sergio Martínez, Miguel Cotto o Canelo Álvarez. Golovkin inevitablemente aterrizaría la pelea con Canelo, pero se alargó y tomó mucho tiempo para concluir, ya que la trilogía que comenzó en el 2017 tomó cinco años y una pandemia mundial más tarde, para terminar.
Las secuelas de Golovkin vs. Monroe Jr.
Una vez que el humo se disipó y a pesar de que algunos observadores sintieron que Golovkin estaba 2-1 con Canelo en la forma en que anotaron el combate, los libros de registro claramente indicaron 2-0-1 a favor de Canelo. Esta brutal dosis de realidad parece haber dejado un sabor amargo en la boca de Golovkin para el deporte del boxeo, ya que después de la segunda pelea con Canelo, Golovkin dejó a su entrenador durante su mejor época, Abel Sánchez, y comenzó a trabajar con Jonathan Banks.
Los últimos años de Golovkin como profesional se describirían mejor como reservados. Parecía que el entusiasmo que una vez tuvo por el boxeo había desaparecido, la política le había envejecido y quemado. Como me dijeron una vez, Golovkin después de la segunda pelea con Canelo era lo que Marvin Hagler habría sido si hubiera seguido boxeando después de la pelea con "Sugar" Ray Leonard.
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