Natasha Jonas defiende este sábado su título del peso wélter de la IBF ante su esperada afición de Liverpool contra Mikaela Mayer.
Jonas lleva cinco victorias consecutivas desde que perdió ante Katie Taylor en el 2021, y Mayer, con sede en Las Vegas, es una pareja de baile a la que Jonas eligió como defensa voluntaria, en parte porque supone un acontecimiento de mayor envergadura, dado que Mayer (19-1) es un nombre importante por derecho propio.
"Tantas veces he estado en la cartelera de otros grandes púgiles escoceses [en el Echo Arena de Liverpool] y encabezar por fin el cartel es especial", dijo Jonas, sobre boxear en casa.
"Es una defensa voluntaria y creo que probablemente la más dura de la división, pero lo he dicho un millón de veces, si quiero estar en la conversación como una de las grandes de esta era, entonces tengo que empezar a vencer a gente de esa lista de las 10 mejores libra por libra, como ha hecho Chantelle Cameron, como ha hecho Katie Taylor".
Esta semana, Jonas, que suma 14 victorias frente a dos derrotas y un empate, declaró que sintió alivio al ganar por fin una corona mundial, después de haber empatado con Terri Harper y perdido con Taylor en sus anteriores participaciones.
"Obviamente sigo queriendo rendir, en cada combate, pero hay un peso al intentar demostrar a todo el mundo lo buena que eres y que perteneces a ese nivel, eso como que te desgasta y te añade otro estrés y otra presión", dijo Jonas. "Ahora que te has quitado ese peso de encima, mucha gente dice: 'Estos últimos combates han sido tus mejores', y es por eso. Es porque ese peso y ese estrés y esa tensión se han ido y ahora, vuelvo a disfrutar del boxeo, aprendiendo y desarrollándome y haciendo lo que se supone que debes hacer."
Jonas tiene 39 años. Admite que está más cerca del final de un viaje profesional que comenzó en el 2017 que del principio, y tiene un final en mente. Preguntada por cuánto tiempo más podría luchar, Jonas dijo: "Buena pregunta, ¡llevo retirándome desde el 2012!".
"Este contrato [Boxxer] es de tres peleas y veremos qué pasa. Si hubiera podido conseguir las peleas que quería el año pasado, tal vez habría sido el final para mí el año pasado. Pero aún me quedan grandes noches y grandes combates. Si puedo conseguirlas este año, probablemente será mi final. Si no, puede que se alargue, pero tengo que seguir ganando para conseguir esos combates, así que ése es el objetivo, seguir ganando y ver qué oportunidades surgen cuando eso ocurra".
Jonas está entrenado por Joe Gallagher, que ha estado trabajando en Arabia Saudí ayudando a montar el nuevo gimnasio de Mike Tyson. Eso significa que Jonas ha estado entrenando con su antiguo compañero de gimnasio de Gallagher, Stephen Smith, que ha iniciado recientemente su andadura como entrenador profesional. Smith tiene un establo que incluye al ex campeón del mundo Charlie Edwards, pero ayudó a Jonas mientras Gallagher estaba fuera.
"Stephen siempre ha sido genial, incluso cuando he entrenado a su lado, habla y te guía en cada sparring, dónde está tu posicionamiento, ha sido un aficionado de élite, ha luchado por títulos mundiales como profesional, no hay nadie en el juego que pueda decirle [algo] en cualquier situación", añadió Jonas. "Sabe comunicar muy bien lo que quiere decir y cómo quiere decirlo, las situaciones que se presentan, y es muy bueno hablando y guiándote. Como entrenador joven y prometedor, va a ser difícil ganarle en conocimientos y experiencia y en la forma en que te guía".
Pero Gallagher lleva varias semanas de vuelta y lo estará para la noche del combate. Jonas dijo que entrenador y entrenador comparten varios rasgos similares.
"Joe es un perfeccionista y yo soy una perfeccionista", dijo Jonas. "Él quiere que las cosas se hagan de una determinada manera, y si yo las hago mal, me frustro, porque sé cómo funciona y todo lo que él dice es lo que tengo que hacer, así que confío al cien por cien en él en lo que dice y trato de hacerlo lo mejor que puedo".