Amir Khan se plantearía volver de su retiro para pelear con Floyd Mayweather o Manny Pacquiao.
El púgil de 37 años se retiró tras ser noqueado en febrero del 2022 por Kell Brook, tras lo cual dio positivo por la sustancia prohibida ostarina y fue inhabilitado durante dos años a partir de ese mes de abril.
A pesar de toda su satisfacción por su buena carrera, sigue interesado en pelear -o hacer exhibiciones- con los dos mejores boxeadores de la era moderna, consciente de que en el 2017 creía que se había acordado una pelea con Pacquiao, con quien durante años entrenó en el gimnasio Wild Card.
También hubo un tiempo en el que, hacia el final de la carrera de Mayweather, Khan, entonces en su mejor momento, parecía más capaz de poner a prueba al invicto estadounidense. Además, pelear con cualquiera de los dos habría resultado lo más lucrativo de su carrera.
"Me han ofrecido ofertas increíbles en Arabia Saudí, Dubai y Abu Dhabi para pelear allí", dijo Khan. "Pero si alguna vez lo hago, voy a hacer un sparring con guantes de 10 onzas; ver cómo me siento y cómo recibo un golpe y si todavía lo tengo en mí, si mi cuerpo todavía está en forma.
"No sé si todavía puedo hacerlo. Tiene que ser una pelea que me motive tanto que me ponga a la altura de las circunstancias. Lo que me motivaría es un [Floyd] Mayweather; Manny Pacquiao; Conor McGregor, o Khabib [Nurmagomedov]. De momento tendría que ser una exhibición, porque obviamente soy un boxeador vetado. Cuando me quiten la prohibición, después de eso podría ser una pelea de verdad. Ya veremos".
A Khan le costó motivarse cuando peleó contra Brook, a pesar de que Brook era su mayor rival y el de más larga duración.
"Normalmente me presionan, y yo me presiono aún más", dijo sobre su preparación para el combate en Estados Unidos con su entrenador de entonces, Brian "Bomac" McIntyre. "Me estaba exigiendo mucho porque quería tener contento a Bomac, pero a mitad del campamento, cuando tuve lesiones y demás -y mi hombro se estropeó antes de la pelea, un pequeño desgarro; no se lo dije a nadie; siempre que lanzaba la mano derecha tenía problemas; me dolía- supe entonces que mi cuerpo se estaba rompiendo". Ya no me gusta este deporte, voy a dejarlo".
"¿Sabes qué? [Perder contra Brook no me molestó.] No lo hizo, de verdad. Honestamente hablando. ¿Sabes cuándo pierdes el amor por algo? La semana de esa pelea, y alrededor de ese tiempo, había perdido el amor por el boxeo. Realmente no me importaba, ni nada, sobre la pelea. Es lo que es. No hay arrepentimiento allí, porque yo no quería estar cerca del boxeo.
"Recuerdo que lo último que hice, cuando salí hacia el ring, fue mirar el reloj. 'En dos horas esta pelea habrá terminado y no tendré que volver a mirar el boxeo'. Era una gran carga para mí. No sé si la carga era porque todo el mundo quería que peleara con Kell Brook todo el tiempo y ese nombre siempre estaba ahí.
"Eso me hizo sentir que tenía que pelear contra él. Quizá podría haberme retirado con un combate más fácil. Pero había algo ahí, estaba contento. Después de esta pelea voy a ser feliz'. Es una forma equivocada de verlo, porque nunca antes había pensado así, mirando el reloj y pensando: "Quiero que se acabe, en dos horas estaré en la cama". Eso me hace pensar que ya estaba medio fuera del deporte. Lo había dejado".
