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La vida limpia de Franklin hace que se transforme para su mayor prueba

Jermaine Franklin se enfrentará a Anthony Joshua más delgado y ligero tras haber transformado su estilo de vida desde la última vez que subió a un ring.

Fue en noviembre cuando Franklin peleó contra Dillian Whyte y se consideró desafortunado por haber perdido por decisión mayoritaria, y antes incluso de empezar a prepararse para Joshua había perdido dos kilos y medio. 

El promotor de Joshua, Eddie Hearn, que también supervisó la pelea con Whyte, ha expresado su preocupación por la mejora de la condición física de Franklin para una pelea con el potencial de revivir o destrozar la carrera de Joshua, independientemente de que sea por motivos personales por lo que el estadounidense está en una forma tan diferente.

Franklin ha dejado de comer carne roja y en su lugar ha dado prioridad a la fruta, la carne de ave, el salmón y los zumos frescos, y explicó: "Quería tener mejor salud. Tenemos algunos problemas familiares -diabetes, hipertensión, cardiopatías- y no quiero ser uno más con los mismos problemas, así que he estado haciendo cambios saludables".

"Al principio tenía unas ganas locas de comer ternera, pero ahora no me molesta en absoluto. Como muchas ensaladas, salmón y pollo, y he empezado a beber zumos. Ahora me lleno tan rápido que es una locura".

"Es difícil intentar cambiar tu vida en medio de un campamento cuando estás acostumbrado a todo y estás haciendo demasiadas cosas a tu cuerpo a la vez. Pensé que sería mejor hacerlo mientras no estaba entrenando y antes de volver al gimnasio".

"Estoy más en forma, soy más rápido y puedo moverme con más facilidad que antes. No ha cambiado mi estilo, pero lo ha mejorado".

Si el combate del sábado en el O2 Arena de Londres -donde también peleó contra Whyte- es la primera salida para el transformado Franklin, también es la primera para Joshua bajo las órdenes de su nuevo entrenador Derrick James.

Mejoró notablemente para la segunda de sus derrotas ante Oleksandr Usyk, tras haber sustituido al veterano Rob McCracken como su entrenador jefe por Robert García, pero bajo las órdenes de James se ha preparado para pelear con Franklin en la relativa privacidad de Dallas.

Franklin admira la reputación de James -construida recientemente gracias a su éxito con los gemelos Charlo y Errol Spence-, pero a pesar de que está en total desacuerdo con los observadores que creen que la carrera de Joshua está acabada tras su enfrentamiento con Usyk, también duda de la rapidez con la que Joshua y James pueden compenetrarse. 

"Todo el mundo dice que si 'AJ' pierde contra mí su carrera está acabada, pero yo no lo veo así", dijo Franklin, de 29 años y cuatro años menor que Joshua. "Eso es insultante para mí como boxeador. Sigo viéndolo como si fuera campeón del mundo y tuviera tres cinturones".

"El boxeo es el único deporte en el que anulamos a la gente por un par de derrotas. No anulamos a un equipo de baloncesto cuando ha tenido una mala racha, pero en el boxeo, cuando pierdes tu trono, si no estás en lo más alto es como si estuvieras en lo más bajo. Todavía tiene una oportunidad de volver.

"Derrick James es un gran entrenador -tiene campeones del mundo-, pero hace falta tiempo para que se desarrolle una relación sana. Podría enseñarte algunas cosas en poco tiempo, pero todavía no te conoce al dedillo: tus debilidades, tus puntos fuertes o tus defectos. Es bueno que tus entrenadores lo sepan, porque saben qué decirte. Es algo más profundo que el aspecto de entrenamiento de la relación que tienes con tu entrenador.

"Lleva al menos un par de años. Si no estás tan unido, sólo te ves cuando vas al gimnasio. Son un par de horas al día. La mayoría de los boxeadores sólo entrenan cuatro veces por semana, así que ver a un tipo ocho horas a la semana y esperar que te conozca... en realidad no va a funcionar así".