LAS VEGAS - Isaac Cruz hizo que Rolando Romero se comiera sus palabras el sábado por la noche.
Cruz (26-2-1, 18 KOs) comenzó rápido y golpeó a Romero (15-2, 13 KOs) de principio a fin, desde la campana de apertura hasta que la pelea se detuvo en el octavo asalto. Romero simplemente no tuvo respuesta para la presión que aplicó Cruz y sólo tuvo pequeños momentos de éxito.
Con la victoria, Cruz se hizo con el título del peso welter júnior.
Romero insultó a Cruz durante todo el período previo a la pelea, refiriéndose a él como un chihuahua en lugar de su apodo de "Pitbull". El bombo culminó con Romero luciendo una cadena de oro con un amuleto de chihuahua con la cara de Cruz durante la semana del combate.
Cuando se le preguntó por la cadena en la rueda de prensa posterior al combate, el padre y entrenador de Cruz, Isaac Cruz padre, no se guardó nada.
"Le hicimos comerse sus palabras", dijo el mayor de los Cruz. "Entrenamos duro e hicimos lo que habíamos planeado. En cuanto a la cadena, puede quedársela porque es un recuerdo para toda la vida de la paliza que le dio mi hijo".
En cuanto a sus planes de futuro, Cruz no descartó a ningún rival. Dijo que está abierto a pelear con cualquiera.
Los medios de comunicación mencionaron combates de unificación contra Subriel Matías, Devin Haney y Gervonta "Tank" Davis (en una revancha) como posibles futuros oponentes. Cruz dijo que estaba abierto a enfrentarse a todos ellos.
"Siempre he dicho que no tengo ningún problema en pelear con cualquiera", dijo Cruz. "Es muy sencillo: Ambas partes que llegar a un acuerdo, y podemos hacer que cualquier pelea suceda. Es sin más cuestión de negociar una pelea y llegar a un acuerdo".
