La noticia de que el campeón de los pesos pesados, Tyson Fury, se enfrentará al ex campeón de los pesos pesados de la UFC, Francis Ngannou, en octubre, es poco probable que caiga ni remotamente bien entre los aficionados al boxeo que quieren verle pelear contra Oleksander Usyk. Por otra parte, el aspecto novedoso del combate entre un boxeador y un luchador de MMA garantizará con toda seguridad que el evento genere mucha publicidad y dinero, lo que será música para los oídos del Rey Gitano.
Los enfrentamientos entre disciplinas, ya sea en el ring o en la jaula, siguen siendo lo suficientemente infrecuentes como para resultar notables, tanto por buenas como por malas razones. Tras el anuncio de Fury-Ngannou, he aquí otros cinco ejemplos famosos (e infames):
Floyd Mayweather vs. Conor McGregor, Las Vegas, 26 de agosto del 2017 (El combate se disputó bajo las reglas del boxeo).
Impulsado por la reputación de los dos hombres en sus respectivas disciplinas y por la falta de voluntad de cada uno para encontrar un fondo más allá del cual no hundirse durante la promoción previa a la pelea, este enfrentamiento se convirtió en uno de los eventos de deportes de combate más lucrativos de la historia, alcanzando 4.3 millones de compras en PPV en Estados Unidos. Según los informes, Mayweather ganó 280 millones de dólares, y McGregor 130 millones, por el evento. El combate se peleó según las reglas del boxeo; tras dominar a McGregor durante la primera mitad de la contienda, Mayweather intensificó su ofensiva en la recta final y se anotó un TKO en el 10º asalto.
Muhammad Ali vs. Antonio Inoki, Tokio, 26 de junio del 1976 (Algún tipo de reglas extrañas, híbridas, nunca especificadas)
¿Cómo describir este desastre? En vísperas de este encuentro entre The Greatest y el púgil profesional más célebre de Japón, Associated Press lo calificó de "...lo que algunos llaman el primer Campeonato de Artes Marciales del mundo - y otros una farsa multimillonaria". Casi 50 años después, sigue habiendo confusión y disputas sobre lo que constituyeron exactamente las reglas; lo que se desarrolló fueron 15 asaltos de Inoki tumbado de espaldas, dando patadas a las piernas de Ali, mientras el campeón de los pesos pesados le rodeaba cautelosamente. El público arrojó basura al ring y coreó "¡Devolución del dinero! Devolución del dinero". Ali sufrió coágulos de sangre en las piernas que afectaron a su movilidad durante el resto de su carrera. No fue un espectáculo edificante. (El combate, por si sirve de algo, fue declarado empate).
James Toney vs. Randy Couture, Boston, 28 de agosto del 2010 (reglas de la MMA)
Toney se encontraba en la segunda fase descendente de su carrera boxística cuando se subió al octágono para enfrentarse al excampeón de la UFC Randy Couture. Conocido por ser frecuentemente diletante en su aplicación a la profesión elegida, el corpulento "Lights Out" parecía haberse sometido a una preparación similar para su debut en las MMA. Couture se lanzó inmediatamente a por las piernas de Toney, lo derribó y lo sometió sin oponer mucha resistencia mediante un estrangulamiento con triángulo de brazo.
Ray Mercer vs. Tim Sylvia, Birmingham, Alabama, 13 de junio del 2009 (reglas de la MMA)
Esta vez le tocó al ex campeón de la UFC presentarse fuera de forma. Sylvia, que había ostentado la corona de los pesos pesados de la organización sólo dos años antes (hasta que la perdió a manos de Couture), se presentó con 310 libras (50 por encima de su peso ideal para pelear) y caminó confiado hacia el boxeador de 48 años, que lanzó un derechazo que detonó en la barbilla de Sylvia y se anotó un nocaut tras sólo nueve segundos.
Holly Holm vs. Ronda Rousey, Melbourne, 14 de noviembre de 2015 (reglas de MMA).
Esta es totalmente tramposa. Aunque había sido una boxeadora profesional de gran éxito, llegando a ser campeona indiscutible del peso wélter, ganando cinturones en 140 y 154, y recopilando un récord de carrera de 33-2-3 (9), Holm se había retirado en el 2013 para centrarse en las MMA. No obstante, merece la pena incluirla por la inmensidad del disgusto: Rousey era la estrella número uno, masculina o femenina, de las MMA, y parecía imparable. Holm, sin embargo, la desmontó antes de derribarla con una patada en la cabeza y detenerla para ganar el título del peso gallo de la UFC en una enorme sorpresa.
