Jacob "Stitch" Durán es un icono del boxeo.
El famoso cortador ha dado a muchos boxeadores asaltos extra y ha definido una generación para los aficionados al boxeo.
Duran habló recientemente con ProBox TV y recordó un momento que le acompañará el resto de su vida: la noche en que Anthony Joshua noqueó a Wladimir Klitschko.
"Queréis una historia de Klitschko, así que os hablaré de la última vez que le vi", dijo Duran a ProBox TV. "Nuestra última pelea, cuando peleó contra Anthony Joshua en el estadio de Wembley, no pude verlo ni a él ni a Vitali hasta el viernes, porque mi hija Carla se había casado ese miércoles. El jueves volé a Londres, de todos modos, estamos en el vestuario repasando esto y aquello".
"Finalmente, al final, le eché el brazo [encima] y le dije: 'Mira, no te preocupes por nada. Voy a cuidar de ti como si fueras mi hijo'. Sé que la noche antes los chicos no pueden dormir".
El británico Joshua fue medalla de oro olímpica en el 2012. Fue aclamado como el próximo gran peso pesado. Klitschko había perdido ante Tyson Fury, pero había sido el último campeón del mundo dominante en la división. Era el momento de la verdad para Joshua.
Duran siguió recordando detalles de la noche del combate. Estaba cerca del ring para el evento principal y el mundo estaba mirando.
"Bueno, aquí estoy cuando llega la hora de pelear, justo antes de que Michael Buffer haga los anuncios, todos los 90,000 británicos locos, sonaban como 150,000 de ellos. Me estoy poniendo la vaselina final, y él [Wladimir] me dice: 'Puedes llamarme hijo'".
"Hombre, eso me llegó al corazón, y [fue] una de las mejores peleas que ha tenido"".
Pasarían semanas, y Duran volvió a ver a Klitschko en Europa.
"La última vez que le vi fue en Alemania, unos tres meses después", recuerda Duran. "Le dije: 'Wladimir, en ese momento, ¿por qué?' Me contestó: 'Stitch, hay muy pocas personas a las que confío mi vida y tú eres una de ellas'".
"No es una mala historia".
