Lyndon Arthur se enfrenta a un cambio de oponente de última hora en Bolton después de que Braian Suárez no pasara el reconocimiento médico previo al combate.
En el último momento, el sustituto, Boris Crighton, ha advertido a "King" Arthur que espere una noche fácil por su cuenta y riesgo, ya que los antiguos sparrings se han convertido en rivales de verdad.
Arthur estaba listo para enfrentarse a Suárez, un artista del nocáut, por el título vacante del peso semipesado de la Organización Internacional de Boxeo (OIB) en el estadio de la Universidad de Bolton, pero unos problemas médicos obligaron al argentino a retirarse y Crighton (10-1, 7 nocáuts) entró en escena.
Crighton, apodado "Blade", viajó desde Glasgow el jueves y rebosaba confianza antes de su gran oportunidad en el programa Wasserman Boxing, en directo por el Canal 5.
Arthur creía que la victoria sobre Suárez y la conquista del título de la IBO le colocarían en una posición privilegiada para conseguir grandes combates con cualquiera de los principales pesos semipesados del mundo.
Pero para mantener vivos esos sueños, el héroe de Manchester debe vérselas con Crighton, dos veces campeón amateur de Gran Bretaña.
"Me enfrento a un tipo que pelea en un peso en el que normalmente no peleo, y a alguien que ha tenido un campamento completo para prepararse para un título mundial, así que no es una hazaña pequeña lo que estoy viendo", dijo Crighton en un comunicado de prensa de Wasserman Boxing.
Él es mucho más grande que yo, pero como el hombre más ligero seré más rápido, más agudo y tengo ese poder, independientemente de si estoy en supermedio o semipesado".
En esos guantes de 10 onzas, desde el peso supermedio hasta el semipesado, todo el mundo tiene el poder de derribarte". Lyndon no lo ignora, y yo tampoco. Los primeros asaltos serán como una partida de ajedrez, pero en los intermedios es donde lo sabremos. El quinto, el sexto y el séptimo serán emocionantes y decisivos".
Crighton, que se estaba preparando para un combate el mes que viene, recibió la llamada al salir de una clase de yoga y supo al instante que no tenía nada que perder, y sí mucho que ganar, si aceptaba la oferta.
Una victoria inesperada sobre Arthur sería "inimaginable" para su carrera, y el púgil de 29 años, doble campeón amateur escocés, ha prometido a su rival que pondrá toda la carne en el asador esta noche.
"He hecho de sparring con Lyndon antes, ha sido un buen sparring, y cuando haces de sparring con un boxeador de alto nivel como Lyndon, los sparrings son como combates de campeonato mundial, y así es como va a ser esta noche. Hice de sparring con Lyndon en el combate previo a su revancha con Anthony Yarde y antes del primer combate con Yarde.
"Lyndon ganó el combate contra Yarde con su jab; es su arma principal y si le permites entrar en ritmo con su jab, controlará el combate".