Shakur Stevenson se convirtió en tricampeón del mundo de los pesos ligeros al conquistar el título de la WBC tras una victoria por decisión unánime sobre Edwin de los Santos, quizá la menos inspirada de su carrera.
En el T-Mobile Arena de Las Vegas, los tres jueces le otorgaron puntuaciones de 115-113, 116-112 y 116-112, y aunque añadió un título de peso ligero a los que ya había ganado en los pesos superpluma y pluma, sabrá que su reputación ha salido más perjudicada que reforzada.
La combinación de la postura zurda de De Los Santos y su falta de ambición en una noche en la que Stevenson mostró una reticencia similar a asumir riesgos o a comprometerse hizo que los 6,000 asistentes estimados en un recinto que puede albergar a 20,000 personas abuchearan desde el segundo asalto hasta la campana final.
Si bien cabía esperar un combate táctico y cauteloso, durante los primeros asaltos hubo motivos para creer que la pelea se convertiría en algo de mayor enjundia.
En cambio, Stevenson, de 26 años, cuyo amigo Terence Crawford es uno de los muchos que esperan que se convierta en el sucesor de Crawford como el mejor boxeador del mundo, demostró una disciplina que en otras ocasiones demostrará ser su punto fuerte, pero que contra De Los Santos le habrá costado seguidores.
Está bendecido con la velocidad, un admirable coeficiente intelectual de boxeo y uno de los conjuntos de habilidades más naturales de todos, pero en el transcurso de 12 tediosos asaltos rara vez lanzó más que su rápido y preciso jab.
Hubo una izquierda al cuerpo en el primer asalto, una derecha-izquierda al cuerpo en el octavo y una derecha al cuerpo en el décimo. En el undécimo también hubo un fuerte derechazo a corta distancia, y un recto de izquierda en el duodécimo, pero rara vez la amenaza de algo más.
En el quinto asalto, De los Santos se burló de Stevenson, en un intento de sugerir que así era como su rival había peleado hasta entonces, pero era Stevenson quien estaba haciendo lo suficiente para ganar la mayoría de los asaltos e intercambios y, a pesar de que la presión recaía sobre Stevenson para que cumpliera, De los Santos parecía contento con perder mientras absorbía el mínimo castigo y permitía que Stevenson cargara con la culpa.
Al final del combate, CompuBox informó de que entre Stevenson y De Los Santos, de 24 años y originario de la República Dominicana, habían asestado 33 golpes potentes. Tal vez lo más revelador fue que los 40 golpes asestados por De Los Santos a lo largo de la pelea representaron el récord más bajo desde la creación de Compubox hace 38 años.