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Wallin no cree que Usyk deba ser campeón del mundo

El contendiente de peso pesado Otto Wallin (26-1, 14KOs) no cree que el campeón mundial unificado de peso pesado Oleksandr Usyk (21-0, 14KOs) deba seguir en posesión de los títulos de la WBA, WBO, IBF e IBO.


"Usyk, [en] su última pelea, fue noqueado por [Daniel] Dubois", dijo Wallin, refiriéndose a la última pelea de Usyk, contra Daniel Dubois en agosto, cuando el ucraniano triunfó en nueve asaltos, pero no sin polémica.


Dubois derribó a Usyk con un golpe al cuerpo que aterrizó en la línea del cinturón de Usyk, sin embargo, el árbitro Luis Pabón dictaminó que el golpe era falta, permitiendo a Usyk más de cuatro minutos para recuperarse -según las reglas unificadas de boxeo relativas a las faltas- antes de volver a la acción.


La decisión del árbitro Pabón indignó al equipo de Dubois y a su promotor Frank Warren, que apelaron sin éxito la decisión ante la WBA. La WBC dio la razón a Pabón y permitió a Usyk seguir su camino.


Wallin, sin embargo, está de acuerdo con Dubois y Warren en que Usyk recibió una ventaja injusta al tomarse ese tiempo para recuperarse.


"Creo que fue un golpe legal, y sin más estaba en el suelo quejándose", dijo el sueco. "El árbitro hizo un trabajo terrible diciéndole a Usyk que se tomara más tiempo. Nunca lo había visto antes. No puede ser legal. No lo entendí. Usyk no tenía muy buen aspecto".


Wallin añadió que la principal debilidad de Usyk son los golpes al cuerpo, citando el combate de Usyk contra Murat Gassiev en el peso crucero indiscutible, que Wallin estudió antes de vencer a Gassiev por decisión en septiembre.


"En sus otros combates, estudié la pelea contra Gassiev y me quejé de sus golpes al cuerpo", dijo Wallin. "Creo que ése es su punto débil".


Wallin regresa al cuadrilátero el 23 de diciembre, cuando se enfrente a Anthony Joshua en Riad (Arabia Saudí). Actualmente está invicto en seis peleas tras su derrota ante Tyson Fury en 2019.


Usyk, por su parte, peleará contra Fury (34-0-1, 24KOs) el 17 de febrero, también en Riad, en un combate que tiene en juego el campeonato mundial indiscutible de los pesos pesados.