Primer día
El Salón Internacional de la Fama del Boxeo esperaba un año "normal".
Pero con los incendios forestales de Montreal poniendo en peligro la calidad del aire en el norte del estado de Nueva York, la inauguración de este año es cualquier cosa menos eso.
"Es un año un poco diferente", admitió el Presidente del Salón de la Fama, Ed Brophy.
El Salón de la Fama disfrutó de un fin de semana trilogía el año pasado, cuando tres clases fueron inducidas al mismo tiempo después de que dos años se perdieran debido a la pandemia. El último fin de semana "normal" fue el del 2018.
Se suponía que las cosas volverían a la normalidad, pero Brophy y su equipo han tenido que pensar sobre la marcha y los eventos programados en los terrenos del Salón de la Fama se trasladaron al Casino Turning Stone, a unos 11 kilómetros de distancia. Esos terrenos, llenos de nostalgia, estaban tristemente desolados y estériles al principio, pero cada vez más aficionados encontraron el camino hacia el Casino.
Para algunos de los asistentes más acérrimos, como el inglés Glenn Wilson y Lee Groves de Compubox, el miércoles es el comienzo del fin de semana de inducción a la IBHOF, pero el jueves es el inicio oficial.
No tardé mucho en llegar al Turning Stone para empezar a ver gente peleando. Me puse al día con John Scully, antiguo aspirante al título de los pesos semipesados, y hablamos en detalle del próximo enfrentamiento entre Artur Beterbiev y Callum Smith, porque Scully es desde hace mucho tiempo un infiltrado en el campamento de Beterbiev, y mientras hacía cola para el café empecé a charlar con Lucia Rijker, a quien entrevisté hace dos décadas en el campamento de Poconos, cuando hacía de sparring con Héctor Camacho Jr. y formaba parte del campamento de Lennox Lewis mientras el gran peso pesado se preparaba para su último combate, que en aquel momento se suponía que iba a ser contra Kirk Johnson, pero que acabaría siendo contra Vitali Klitschko.
Frustrantemente, los pesajes para los combates de ShoBox del viernes, dos puertas más abajo, en el Turning Stone Casino, estaban programados a la misma hora que la primera conferencia a pie de ring, que contó con la siempre inspiradora Ann Wolf.
Wolf habló de cómo descubrió el boxeo cuando era madre de dos niños sin hogar tras la muerte de sus padres, porque ningún otro deporte le permitía llevar a sus hijos a entrenar. El gimnasio de boxeo los acogió mientras ella se ejercitaba y, capaz de encestar un balón de baloncesto a los 15 años, pudo dar rienda suelta a su atletismo natural. Después de sólo tres peleas amateur, ya estaba cancelada como profesional y futura miembro del Salón de la Fama.
"Tenía fuerza", afirma. "Era diferente. Sé una cosa: tenía poder masculino. Algunas mujeres tienen poder masculino, otras no".
Wolf también habló de lo difícil que fue para ella hacerse respetar o, más exactamente, de por qué no lo fue, en lo que era un deporte dominado por los hombres.
"Nunca me han faltado al respeto en este deporte, todos me respetaban, porque podía patearles el culo a la mitad".
Hubo charlas junto al ring con Chiquita González y el inducido del 2023 Rafael Márquez. Se les pidió que hicieran una lista de sus tres mejores boxeadores mexicanos, y Márquez eligió a Salvador Sánchez, Julio César Chávez y Juan Manuel Márquez, mientras que González eligió a Carlos Zárate, Pipino Cuevas y Rubén Olivares.
Numerosos boxeadores e invitados han sufrido retrasos para llegar al fin de semana de la inducción debido a los incendios forestales, pero había muchos en la ceremonia oficial de apertura y los que estaban en el escenario eran Timothy Bradley, Ray Mercer, Junior Jones, Roberto Duran, Brad Goodman, Rijker, Alicia Ashley, Tim Ryan y, momentos después Sebastián y Gabriela Fundora.
Ryan felicitó a Bradley por sus habilidades como locutor para ESPN, afirmando que era "casi" tan bueno como el difunto Gil Clancy, antiguo colega de Ryan en las retransmisiones, mientras que el ex campeón de los pesos semipesados y pesados Michael Spinks dijo inexpresivo: "Me alegro de estar entre todos vosotros y creo que eso es todo lo que tengo que decir".
Las personas que han fallecido en los últimos 12 meses recibieron un aplauso, incluidos Bobby Goodman, Jerry Roth, Steve Smoger, Mills Lane, Eder Jofre y Ken Buchanan, pero, a sólo ocho días del cumpleaños de Duran, Brophy dirigió una prematura interpretación del "Cumpleaños feliz" para uno de los grandes de todos los tiempos.
Duran, obviamente, se lo tomó en serio.
