La mayoría de las veces, si el boxeador perdedor tiene una cláusula de revancha, la acepta, por lo que no fue una sorpresa cuando Chris Eubank Jr anunció que iba a ejercer la suya para otro combate con Liam Smith.
Lo que fue un shock fue la facilidad con la que Smith le hizo daño en enero. En el pasado ha demostrado ser muy, muy resistente, y Smith no es el tipo de boxeador que uno esperaría que lastimara a un tipo con ese tipo de mentón, por lo que me he preguntado si el peso fue lo que afectó a Eubank Jr.
Ese combate se hizo para seguir impulsando a Eubank Jr. Mientras que Smith ha sido campeón y ha tenido una carrera muy, muy buena, pero peligrosa, antes del combate se consideraba que ya había pasado su mejor momento. Si Eubank Jr hubiera peleado para llegar a las 160 libras, sus niveles de energía y su capacidad para encajar golpes se habrían visto afectados.
Su disposición a boxear con Conor Benn a 157 libras es interesante, y me hace preguntarme si Benn podría haberle hecho daño. Al pasar rápidamente de un campo de entrenamiento a otro, el peso de Eubank Jr debería haber estado más controlado de lo que habría estado si se hubiera tomado un tiempo de descanso, pero si su peso era más bajo en la preparación para el combate contra Benneo y decidió mantenerlo más bajo de lo que normalmente habría sido, entonces eso podría haber marcado la diferencia. Algunos boxeadores no pueden mantener su peso de combate durante mucho tiempo sin debilitarse, otros necesitan ganar peso rápidamente y recuperarlo enseguida. Activar su cláusula de revancha significa que tendrá que volver a ganar peso, pero él es quien mejor conoce su cuerpo.
Tampoco podemos estar seguros de hasta qué punto le ha afectado la preocupación por la salud mental de su padre, Chris Eubank Sr. A los boxeadores les pasan cosas, igual que a otras personas, y pueden tenerlas en la cabeza entre un entrenamiento y otro. Es posible que Eubank Jr no quisiera pensar en ello, pero que el hecho de que se le preguntara constantemente lo mantuviera en su mente y lo convirtiera en una distracción.
Desde luego, no creo que su entrenador, Roy Jones Jr, fuera el problema de su actuación. Nada en ese resultado sugería un problema con su entrenador, o estilístico, o algo que fuera diferente de antes. No se le impusieron cambios drásticos con los que no se sintiera cómodo. Simplemente recibió un golpe y no pudo recuperarse. Incluso cuando Eubank padre y Ronnie Davies, y no Jones hijo, le estaban preparando para boxear con Benn, parecía otro caso más de la imprevisibilidad de Eubank hijo.
Se ha dicho que sus mejores actuaciones vinieron con Nate Vasquez, pero venció a un declinado James DeGale, que quizás fue su mejor victoria, y venció a Matt Korobov en un combate que pensé que iba a ser muy, muy difícil, cuando Korobov se dislocó el hombro. Todavía no ha rendido al más alto nivel, y no ha sido campeón del mundo con uno de los cuatro organismos sancionadores reconocidos, pero en las circunstancias adecuadas todavía puede ser capaz de hacerlo.
De cara a la revancha, creo que Eubank Jr es más fuerte que Smith. Si el problema fuera el peso y le afectara de nuevo, volveríamos a verle golpeado y herido, pero si hace el peso que necesita y es más resistente a los ataques de Smith, su intensidad y su ventaja natural de tamaño podrían poner en apuros a Smith, así que estoy interesado en verlo.
No sería una revancha como entre Devin Haney y George Kambosos Jr, cuando el estilo de Kambosos Jr le impidió hacer los ajustes necesarios para estar al nivel de Haney. Smith-Eubank Jr II es un buen combate, y salvo que alguien vuelva a quedar atrapado, es un buen boxeo para la audiencia televisiva.
La vena competitiva del púgil perdedor le hace querer volver y demostrar que es mejor de lo que ha demostrado, pero también puede ser aprensivo, después de haber sido herido. Puede que reciba un golpe limpio en un combate y se lo piense demasiado, porque la última vez que lo hizo salió herido. Del mismo modo, las circunstancias podrían ayudar a Eubank Jr tanto como perjudicarle.
Smith confiará en que puede volver a parar a Eubank Jr, y se lo merece, pero no creo que lo vea fácil. Sabrá que vuelve a boxear contra alguien que ya ha demostrado su capacidad.
En cualquier caso, las cláusulas de revancha son una tendencia cada vez más extendida. No recuerdo haber oído hablar tanto de ellas cuando pelearon Muhammad Ali o Ray Leonard. Una revancha se desarrollaría por sí sola si tuviera mucho sentido y mucho dinero. Cuando Leonard perdió contra Roberto Duran, Duran quiso la revancha porque había dinero. El mercado debería exigir estas revanchas, a veces son absurdas frenan el deporte.
Recuerdo que gané todos los asaltos contra Lovemore Ndou y tuve que darle la revancha debido a una cláusula de revancha, y tuvimos que ponerla en la cartelera de Ricky Hatton-Juan Lazcano porque nadie la quería como evento principal. Nadie esperaba una diferencia en Haney-Kambosos Jr II, tampoco.
Este combate, es una buena revancha, sin embargo, no está en esa categoría. Cualquiera puede quedar atrapado. Es cuando alguien es superado cuando las revanchas son estúpidas.
Después de otra derrota, la gente hablaría de Eubank Jr como si estuviera acabado. Pero hasta entonces, este es el tipo de combate que quiero ver por televisión.
